Protegiendo a tu perro: La guía esencial sobre desparasitación canina
Cuando adoptamos un perro, asumimos una gran responsabilidad no solo por su bienestar físico sino también por su salud.
Uno de los aspectos más importantes, pero a menudo subestimado, es la desparasitación. Los parásitos, ya sean internos como los gusanos o externos como las pulgas y garrapatas, pueden parecer solo una molestia menor al principio. Sin embargo, estos parásitos pueden transmitir enfermedades y crear problemas de salud incluso graves a nuestros compañeros caninos y también a nosotros humanos.
Los parásitos internos, como los gusanos del corazón, lombrices intestinales, tenias y gusanos redondos, se alimentan de los nutrientes vitales de nuestro perro o de su propia sangre, debilitando su sistema inmunológico y comprometiendo su salud general. Los síntomas pueden variar desde una simple incomodidad hasta condiciones que amenazan la vida, como el bloqueo intestinal o la insuficiencia cardíaca.
Por otro lado, los parásitos externos, que pueden habitar en su piel y en su pelo, no solo causan irritación y malestar, sino que también pueden transmitir enfermedades graves y facilitar la infestación de parásitos internos.
Además, algunos parásitos que afectan a los perros pueden transmitirse a los humanos. La prevención y el tratamiento oportuno de estas infestaciones parasitarias no solo aseguran la salud y la felicidad de nuestros fieles amigos, sino que también protegen a nuestras familias y a nosotros mismos.

En las siguientes secciones, exploraremos más a fondo qué son los antiparasitarios, por qué son tan cruciales para la salud de los perros y con qué frecuencia debemos incorporar la desparasitación en la rutina de cuidados de nuestros compañeros caninos.
¿Qué son los antiparasitarios?
Los antiparasitarios son sustancias químicas diseñadas específicamente para prevenir, controlar y eliminar los parásitos que invaden y viven dentro o sobre nuestros perros. Estos productos sirven para garantizar su salud y prevenir la transmisión de enfermedades parasitarias a otros animales y humanos.
Los antiparasitarios se clasifican en dos categorías, dependiendo del tipo de parásitos que combaten: internos y externos.
🐾Antiparasitarios internos
Estos se utilizan para tratar y prevenir parásitos que viven dentro del cuerpo del perro, como los gusanos intestinales (lombrices, tenias, gusanos redondos) y el gusano del corazón. Los antiparasitarios internos comúnmente vienen en forma de pastillas, inyecciones o líquidos que se administran oralmente. Actúan interrumpiendo los sistemas vitales de los parásitos internos, lo que les impide crecer, reproducirse o, en muchos casos, les causa la muerte directamente.
🐾Antiparasitarios externos
Estos productos están destinados a repeler o eliminar parásitos que viven en la piel o el pelaje de los perros, como pulgas, garrapatas y ácaros. Los antiparasitarios externos suelen presentarse en forma de collares antiparasitarios, soluciones tópicas, sprays o champús. Funcionan de varias maneras, incluyendo paralizar y matar los parásitos adultos, impedir el desarrollo de sus huevos o larvas, o repelerlos para evitar la infestación.
¿Por qué es tan importante la desparasitación en perros?
Los parásitos, tanto internos como externos, representan una amenaza significativa para la salud y el bienestar de nuestros amigos caninos. Estos organismos invasores no solo pueden causar malestar y enfermedades en los perros, sino que también presentan el riesgo de zoonosis, lo cual implica que ciertos parásitos pueden transmitirse de animales a humanos.
Impacto de los parásitos en la salud de los perros
Los parásitos internos son aquellos que pueden vivir en los intestinos, los pulmones, el hígado e incluso en el corazón del perro. En esta categoría están los gusanos redondos, lombrices intestinales, los que se alojan en el corazón, en pulmones y ojos y los gusanos planos como las tenias, que pueden afectar gravemente la salud de un perro.
Pueden causar problemas gastroentéricos como son los vómitos, la diarrea, la anemia, una nutrición deficiente y adelgazamiento, debido a que los parásitos consumen los nutrientes esenciales.
Pueden causar también daños severos en órganos internos. En casos extremos, las infestaciones parasitarias pueden incluso ser fatales.
Algunos de estos parásitos pueden transmitir la filariosis. Esta enfermedad la provoca un gusano que se instala en los pulmones o en el corazón y puede provocar la muerte del perro. Otra enfermedad que pueden transmitir es la leishmaniosis, que puede provocar problemas muy graves, como problemas renales, inmunológicos o neurodegenerativos y pueden ocasionar la muerte de nuestros amigos peludos.
Los parásitos externos son aquellos que se instalan en el pelaje o en la piel del perro. En esta categoría se encuentran las pulgas, las garrapatas, los piojos y los ácaros. No solo son irritantes para la piel, provocando picor excesivo, anemia, cansancio, además de poder infestar el entorno del hogar; sino que también pueden ser portadores de enfermedades graves, como la enfermedad de Lyme y la erliquiosis, transmitidas por garrapatas.
¿Cada cuánto tiempo hay que desparasitar a los perros?
Determinar con qué frecuencia desparasitar a tu perro es fundamental para mantenerlo saludable y libre de parásitos. Sin embargo, la frecuencia puede variar dependiendo de varios factores, incluyendo la edad del perro, su estilo de vida, su estado de salud y el entorno en el que vive.
Generalmente, se recomienda desparasitar a los cachorros antes de su primera vacuna, es decir, entre los primeros 21 y 30 días de vida. Es importante que la madre esté sana y desparasitada, y estén en un entorno higiénico y controlado, puesto que los parásitos internos pueden ser transmitidos a los cachorros incluso antes de nacer, dentro del propio vientre.

Los veterinarios recomiendan desparasitar con el uso de jarabes antiparasitarios o gotas específicas para cachorros, cada mes hasta los seis meses de edad, o cada 15 días al principio y después cada mes, esto debido a que los cachorros están todavía en el periodo de lactancia o ya están cambiando a la alimentación sólida.
Para los perros adultos, es decir, a partir del año de edad aproximadamente, la frecuencia estándar recomendada para la desparasitación interna suele ser cada tres meses, durante los cambios de estación para prevenir achaques derivados de la proliferación parasitaria ocasionados por los cambios externos del ambiente en el que viven nuestros compañeros peludos.
Sin embargo, esta frecuencia puede variar dependiendo del estilo de vida que lleve y de su lugar de residencia.
Se recomienda desparasitar a los perros adultos una vez al mes, si el perro está en un área de alto riesgo para ciertos parásitos o si tiene un estilo de vida que los expone más a los parásitos, como los perros que pasan mucho tiempo al aire libre, los que cazan o los que están en contacto frecuente con otros animales, y también los que residen en zonas urbanas, se deben desparasitar cada mes o en función del producto utilizado.
También existen situaciones en las que un perro convive con personas con sistema inmune vulnerable, como ancianos o niños. En este caso, se recomienda desparasitarlo cada mes.

En cuanto a la desparasitación externa, la frecuencia recomendada para el tratamiento preventivo contra pulgas y garrapatas suele ser mensual, especialmente en las temporadas más cálidas y húmedas cuando estas plagas son más activas. Sin embargo, algunos productos de nueva generación pueden ofrecer protección durante períodos más prolongados, como cada tres meses o incluso más.
El tratamiento para otros parásitos externos, como los ácaros causantes de la sarna, puede depender del diagnóstico y las recomendaciones de un veterinario, ya que el tratamiento puede variar según el tipo específico de ácaro y la gravedad de la infestación.
La importancia de consultar con un veterinario
Es crucial consultar con un veterinario para establecer un programa de desparasitación personalizado para tu perro. El veterinario considerará todos los factores relevantes, incluyendo los mencionados anteriormente, además de realizar evaluaciones de salud regulares para detectar cualquier signo de infestación parasitaria.
Un programa personalizado no solo asegura que tu perro reciba la protección más efectiva contra los parásitos, sino que también evita el uso excesivo de antiparasitarios, lo cual es importante para evitar la resistencia a estos medicamentos y para proteger la salud de tu perro.
¿Cómo desparasitar a tu perro?
🐾Consejos para la desparasitación interna
Los parásitos internos pueden entrar en nuestros perros por varias vías de transmisión. Además del contagio directo a través de la leche materna, en el caso de los cachorros, también puede producirse al olfatear el suelo o comer alimentos contaminados.
Aunque las lombrices intestinales son las más frecuentes, también pueden encontrarse en los pulmones o el corazón. El modo de transmisión más frecuente es el contacto con las heces de perros ya infestados. Los huevos que expulsan en las heces pueden permanecer vivos hasta 5 años e infectar fácilmente a un perro sano. Por esta razón es muy importante mantener un entorno limpio para tu perro. Recoge y desecha las heces de tu perro de inmediato para reducir el riesgo de transmisión de parásitos.

En áreas donde el gusano del corazón es prevalente, se recomienda la prevención durante todo el año. La prevención del gusano del corazón a menudo se combina con el tratamiento contra otros parásitos internos.
Controla las pulgas, ya que pueden ser portadoras de parásitos internos como las tenias.
El veterinario puede recomendar entre jarabes, pastillas o comprimidos masticables, que tienen distinta duración según la marca. En general, los perros deben desparasitarse internamente cada 3 meses.
🐾Consejos para la desparasitación externa
La desparasitación externa es esencial para proteger a tu perro de parásitos como pulgas, garrapatas y ácaros, que no solo causan molestias y posibles reacciones alérgicas, sino que también pueden transmitir enfermedades graves tanto a los perros como a los humanos.
Selección del producto: Elige productos específicamente diseñados para perros y adecuados para su peso y la salud. Ten en cuenta que algunos productos destinados a perros pueden ser tóxicos para otros animales, como los gatos.
Algunos productos también están preparados para repeler el mosquito de la leishmaniosis.
Aplicación correcta: Sigue cuidadosamente las instrucciones de aplicación del producto. Algunos tratamientos requieren aplicación tópica en la piel, mientras que otros pueden ser orales. Asegúrate de aplicar el producto en un área donde el perro no pueda lamerlo.
Consistencia: Mantén un calendario regular para los tratamientos preventivos. La consistencia es clave para mantener a tu perro protegido contra las infestaciones.
Ambiente: Trata el entorno de tu perro para prevenir reinfestaciones. Limpia la ropa de cama del perro, aspira regularmente y, si es necesario, utiliza tratamientos ambientales contra pulgas y garrapatas.
Revisiones regulares: Revisa a tu perro regularmente en busca de signos de infestación, especialmente después de paseos en áreas propensas a parásitos externos, como parques y áreas boscosas.
Salud de la piel: Mantén la salud de la piel y el pelaje de tu perro con una nutrición adecuada y baños regulares, pero no excesivos, ya que esto puede alterar los aceites naturales de la piel que protegen contra los parásitos.
Consulta veterinaria: Siempre consulta con un veterinario si no estás seguro de qué producto usar o si tu perro muestra signos de una reacción adversa después de un tratamiento antiparasitario.
Al seguir estos consejos y mantener un régimen de desparasitación externa, puedes ayudar a garantizar que tu perro esté protegido contra los parásitos externos, contribuyendo así a su bienestar general y previniendo posibles problemas de salud relacionados con estos parásitos.
Las diferentes soluciones antiparasitarias que existen en el mercado son:
🐾Pipetas antiparasitarias para perros
El producto debe aplicarse en aquellas zonas que el perro no pueda lamer, normalmente a lo largo de la columna. Suelen durar un mes, pero es recomendable consultar con el veterinario.
🐾Collares antiparásitos
El principio activo se libera poco a poco, dependiendo de la marca tiene una duración aproximada de entre cuatro y ocho meses.
🐾Champús antiparasitarios
Poseen propiedades repelentes y algunos insecticidas para prevenir o para eliminar los parásitos. Para que sea más efectivo, se recomienda usarlos cada dos semanas.
🐾Sprays para desparasitar
Estos productos pueden ser repelentes o pueden combatir una infestación. Los hay también de uso ambiental para eliminar pulgas, garrapatas, mosquitos y ácaros que pueda haber en la zona donde habita el perro. Se aplica sobre el cuerpo del animal a contrapelo para que la piel absorba el producto y sea efectivo.
Conclusión
En conclusión, la desparasitación es un aspecto esencial en el cuidado de la salud de nuestros perros, ya que los protege contra una amplia gama de parásitos internos y externos que pueden afectar enormemente a su bienestar y calidad de vida.
Es esencial recordar que la desparasitación debe adaptarse a las necesidades individuales de cada perro, teniendo en cuenta la edad, el estilo de vida, el entorno en el que vive y su estado de salud general. Por ello, la consulta con un veterinario es indispensable para establecer un calendario de desparasitación personalizado que ofrezca la protección más efectiva para tu amigo peludo.
Asegúrate de utilizar productos antiparasitarios de calidad, siguiendo siempre las indicaciones de uso y dosificación recomendadas por los profesionales.